Cómo plantar semillas

SEMILLAS

Antes de plantar tu semilla, tienes que conocer las condiciones que requiere la planta. El clima, la temperatura, la humedad o la luminosidad, ya que hay varios tipos de semillas.

Para plantar una semilla, puedes utilizar una maceta del tamaño que requerirá la futura planta o un pequeño bote para hacer de semillero. Llénalo de sustrato antes de sembrar.

Humedece la tierra e introduce las semillas a la profundidad de un cm aprox. Aquí tienes unas pequeñas guías para no meter la pata, sobre cómo plantar semillas pequeñas

Si miden cerca de 0,5cm de ancho, no hay que cubrirlas con una capa superior a 1 cm. Además, procura que las semillas estén separadas las unas de las otras si plantas más de una. En cada maceta puedes plantar dos o tres semillas, ya que tendrán espacio y crecerán bien.

Una vez hecho este paso, debes comprobar que hay un drenaje que evite que las raíces se asfixien, o sea mirar si la maceta tiene agujeros en el fondo, para que el agua pueda salir y que no se produce humedad permanente.

Para que las semillas reciban todos los nutrientes necesarios y se desarrollen bien, es importante fertilizarlas de vez en cuando. Los fertilizantes naturales son la mejor opción. Puedes comprar fertilizantes en tiendas especializadas o fabricarlos tú mismo/a.

(Estiércol de animales de granja, los posos de café, …)

Riego de las semillas:

Para que las semillas germinen, hay que regar la planta de forma habitual. ¡No dejes que el sustrato se seque! Mantén húmeda la maceta, pero evita un exceso de agua.

Una vez las semillas hayan germinado, las puedes trasplantar a otra maceta o a otro terreno.

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